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Los límites en la crianza
Los límites en la educación, son como las normas de convivencia en una sociedad, si no las hay, se convierte en una anarquía, que es precisamente lo que parecen algunas familias cuando no existen límites bien establecidos y coherentes. Pero, la realidad es, ¿Como poner estos límites? ¿De qué forma? y ¿Cuándo?
No hay una sola forma de establecer límites, y sobre todo no es nada sencillo, pero sí que puedes tener algunas ideas que te orienten y te ayuden, a que los límites tengan un objetivo justo y proporcionado, y sobre todo, que vayan orientados a la enseñanza.
¿Cuáles son los límites en la crianza de los hijos?
Se refiere a las reglas, normas o posibles restricciones que puedes establecer como padre o madre, orientados hacia un desarrollo saludable, guiando las conductas y los comportamientos de tus hijos o hijas.
Estas restricciones, ayudan a tus hijos a entender que hay comportamientos que no son positivos, y que toda conducta, tiene consecuencias asociadas a sus acciones.
Los límites se apoyan en tres pilares fundamentales, el respeto, la enseñanza de su responsabilidad y el establecimiento de una estructura sana en la familia. Es la única forma que tus hijxs aprendan, exploren y se desarrollen en un marco seguro.
¿Por qué son importantes los límites?
Lo primero de todo es entender, que los límites les va a proporcionar a tus hijos seguridad y un sentido de estabilidad emocional. Les enseña la importancia de ser responsables de sus acciones.
Les ayuda a desarrollar habilidades sociales, y a tener confianza en sí mismos, al comprender cómo interactuar con los demás de manera apropiada. Desarrollan valores fundamentales como el respeto, la empatía y la responsabilidad.
Unos límites claros y firmes, les va a orientar a prevenir comportamientos y conductas que no sean apropiadas o que implique algún riesgo innecesario. Les va a enseñar sobre las posibles expectativas sociales y las reglas que pueden encontrar en diferentes entornos, como la escuela, amigos o la sociedad en general
Los límites fomentan la autonomía, ya que aprenden a tomar sus propias decisiones dentro de un marco de seguridad y bien definido.
Para resumir, podríamos decir que los límites proporcionan una estructura sólida para el crecimiento personal, emocional, social y cognitivo.
Formas de establecer límites
Como decía anteriormente, no hay una sola forma correcta o única de establecer límites, pero sí que existen diferentes estrategias muy efectivas de establecer límites de manera positiva y constructiva…Aquí te dejo algunas de ellas, o las que considero más importantes:
Los límites deben de ser claros, sencillos y consistentes. Es decir, que se entienda perfectamente tu objetivo o lo que quieres transmitirle.
Que entiendan que cruzar el límite tiene consecuencias, como la pérdida de privilegios, sobre todo las pantallas. Nunca restringir su deporte, ya que el deporte no es un hobbie solamente, el deporte es SALUD.
Reconoce y elogia el buen comportamiento cuando respetan los límites establecidos. Piensa que reforzar positivamente cuando hacen las cosas bien, es un un recurso muy poderoso para asegurarte comportamientos deseables en el futuro. Piensa que tus actos gritan más que tus palabras.
Que colaboren tus hijos en la creación de los límites. Es la única forma de que comprendan y respeten las razones detrás de las reglas. Aparte, al ser ellxs los que deciden, estarán más abiertos a complir con lo establecido.
Es muy importante que entiendan el por qué de las reglas y normas. Aunque no estén dispuestos a colaborar en el entendimiento de las razones, explicarles el motivo, les ayudará a comprender el propósito detrás de las normas
A la hora de poner límites, no debe de ser algo totalmente estático, según la edad del niño, o la situación, se puede ser relativamente flexible con las normas. Eso sí, siempre que haya coherencia. Recuerda que una relación de amor es dinámica.
A nadie le gusta que le pongan límites, sobre todo a los niños. Recuerda que a la hora de aplicarlos, posiblemente desencadene un torrente de emociones, como el enfado o frustración. Es ahí cuando debes aplicar la comprensión y la empatía, y sobre todo gestionar tus propias emociones.
¿Cómo influyen los límites en su desarrollo a largo plazo?
Como decía anteriormente, no hay una sola forma correcta o única de establecer límites, pero sí que existen diferentes estrategias muy efectivas de establecer límites de manera positiva y constructiva…Aquí te dejo algunas de ellas, o las que considero más importantes:
Los límites deben de ser claros, sencillos y consistentes. Es decir, que se entienda perfectamente tu objetivo o lo que quieres transmitirle.
Que entiendan que cruzar el límite tiene consecuencias, como la pérdida de privilegios, sobre todo las pantallas. Nunca restringir su deporte, ya que el deporte no es un hobbie solamente, el deporte es SALUD.
Reconoce y elogia el buen comportamiento cuando respetan los límites establecidos. Piensa que reforzar positivamente cuando hacen las cosas bien, es un un recurso muy poderoso para asegurarte comportamientos deseables en el futuro. Piensa que tus actos gritan más que tus palabras.
Que colaboren tus hijos en la creación de los límites. Es la única forma de que comprendan y respeten las razones detrás de las reglas. Aparte, al ser ellxs los que deciden, estarán más abiertos a complir con lo establecido.
Es muy importante que entiendan el por qué de las reglas y normas. Aunque no estén dispuestos a colaborar en el entendimiento de las razones, explicarles el motivo, les ayudará a comprender el propósito detrás de las normas
A la hora de poner límites, no debe de ser algo totalmente estático, según la edad del niño, o la situación, se puede ser relativamente flexible con las normas. Eso sí, siempre que haya coherencia. Recuerda que una relación de amor es dinámica.
A nadie le gusta que le pongan límites, sobre todo a los niños. Recuerda que a la hora de aplicarlos, posiblemente desencadene un torrente de emociones, como el enfado o frustración. Es ahí cuando debes aplicar la comprensión y la empatía, y sobre todo gestionar tus propias emociones.
Recuerda…
Poner límites no solamente es decir “NO”, es guiar con amor y cariño. Es enseñar a tus hijos a ser personas respetuosas y responsables. ¡Hagamos de la crianza y la educación un camino de aprendizaje mútuo!..y sobre todo, mucho AMOR.
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